La fiesta de Año Nuevo en la casa de nuestras hermanastras iba bien hasta que mi hermanastro se presentó, estropeando el humor con su monstruosa verga.Nada más marcarse, mis dos hermanastraS no pudieron evitar mirarlo con asombro.Sus ojos inocentes se abrieron de curiosidad y deseo, haciendo imposible resistirse.Observé desde el costado cómo mis hermanastra, tanto pequeñas como adorables, se turnaban para montar su enorme polla.Sus lindas caras se iluminaron de placer mientras experimentaban sus impresionantes habilidades.La vista era hipnotizante, sus pequeños cuerpos siendo dominados por su enorme.El ángulo POV me dio una visión íntima de su encuentro apasionado, dejándome sin aliento.Fue un viaje salvaje, un comienzo perfecto para el Año Nuevo y un recuerdo que nunca olvidaría.